Desde que mi hermana está mal no he sido capaz de escribir una sola letra, la tengo en mente todo el día y estoy absolutamente destrozada por el mal que la aqueja, máxime por la impotencia de no poder ayudarla.
Ni siquiera se encuentra con ánimos de que hablemos y la entiendo perfectamente porque aunque las veces que lo hemos hecho intento hablarle más o menos animada, se lo duro que debe ser asimilar algo así que entra de la noche al día y que nadie te da esperanza de cura total.
Me siento fatal porque no puedo entender porque todo le pasa a los mejores y porque sin querer hacer reproches, no entiendo a veces como Dios hace esto, se que siempre escoge a sus mejores soldados para las batallas más duras, pero me cuesta tanto...
Estoy entrampada con todos los santos porque no puedo hacer nada que no sea rezar y esperar que Dios tenga a bien concederme un milagro, porque eso es lo que le pido para la total recuperación de mi hermana.
LAURA
