Si supieras con que pena te recuerdo a cada instante, harías por contactarme... sin nada y nadie importarte. Me entristece enormemente tanto silencio y desaire, pero vives a tu modo... a tu ritmo y a tu aire. Se que te encuentras muy bien muy tranquila y más feliz, en realidad eso es todo... lo que más me importa a mi. Mi vida ha cambiado tanto que ni imaginar podrías, pero hoy no quiero hablarte... de mis penas ni alegrías. Habrá tiempo para todo si es que decides volver, pero volver de otro modo... para mi ya no hay ayer.
Escribo constantemente en este blog y en mi mente, grabando en mi corazón... las palabras más ardientes. Mi mente vuela veloz por los recuerdos más bellos, mis labios esbozan sonrisas... al revivirlos de nuevo. Por qué voy a atormentarme con este dolor tan fiero??, eso ha de quedar atrás... ni tu ni yo lo queremos. A veces nos detenemos en el momento más cruel, eso es no saber querernos... y negarnos a aprender. La vida no es un invento es un regalo de Dios, venimos a ser felices... esa es nuestra obligación. Que hay quebranto y sufrimiento?? naturalmente que si, quién diría a boca llena... que es plenamente feliz?? Pero la vida es un rato hay que sacarle su esencia, no sufrir por necedades... y aprender de la experiencia.
Me costó cruzar tu puerta entrar y no verte a mi lado, te busqué por todos sitios... pero aún no te he encontrado. Ver que poco espacio ocupas el alma me ha destrozado, tu "presencia" si se nota... se percibe en todos lados. Estoy sentada en tu sala miro y te veo a mi lado, en mi mente hablo contigo... las cosas mucho han cambiado. Que triste la despedida tan cargada de silencios, con miradas tan pobladas... de perdones y te quieros. Y aunque crean un adiós nos dijimos hasta luego, la muerte no puede romper... lo que ambas nos queremos. Que lejos, te haces presente yo en la tierra, tu en cielo, hermana no olvides nunca... lo que te quise y te quiero.