He visto todas las horas
que en la noche marcó el reloj,
he sufrido, he llorado...
reviviendo gran dolor.
Volví a ver tu cuerpo inerte
abandonando tu hogar,
el dolor de tus tres hijos...
y más lágrimas que el mar.
Sigo sin poder creer
que tu faltas en la vida,
mil canas poblarán mis sienes,
y aún pensaré que es mentira.
Porque te fuiste veloz
sin que diera tiempo a nada,
que llegué a tu cabecera...
cuando ya sedada estabas.
Y al decirte "estoy aquí"
tus ojos fueron ventanas,
ojos ya cristalizados...
dónde la muerte asomaba.
Los abriste varias veces
quizá buscando a tu hermana,
yo te cogía las manos...
pero ya no me encontrabas.
Si mi corazón partías
el alma me destrozabas,
como pude no morir...
viéndote partir, hermana??
Tu hermana Gigi.
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